Un triunfo que suma y da confianza
El partido de ayer era la previa al Superclásico del próximo domingo y el resultado contra Huracán iba a decidir los ánimos de la semana. El equipo venía de perder y no afrontaba una situación cómoda. Los goles no aparecían y, por ende, los delanteros no convertían. También el irregular funcionamiento en defensa provocaba un panorama más complicado aún. Es por eso que varias cosas se pueden rescatar de la victoria que consiguió River ayer.
A pesar de que hubo algunas desatenciones, la defensa mostró una mejoría en cuanto al orden y equilibrio. Además, Ferrero demostró que partido tras partido se va adaptando al equipo y demuestra estar a la altura de lo que es la institución. Nico Sanchez se mostró más seguro que otras veces, mientras que Ferrari y Diaz tuvieron buena participación tanto en ataque como en defensa. Y fue el uruguayo quien tiró el centro para el segundo gol.
Una aparición interesante en el mediocampo fue la de Roberto Pereyra. El juvenil volvió a la titularidad tras varios cotejos, desplazando a Abelairas entre los suplentes. Sin ser brillante ni muchos menos, cumplió y parecería que se ganó un lugar en el partido contra Boca. Por otra parte, es importante que Canales haya vuelto a convertir y llegue entonado a la gran cita del semestre.
De todos modos, falta volumen de juego y seguir ajustando conceptos. Cuando Gallardo no está fino, se nota la falta de desequilibrio de mitad de cancha hacia adelante. Esa que quizás pueda dar el propio ‘Muñeco’ la semana que viene, acompañado por el Keko Villalva o Funes Mori. Y a lo mejor, Astrada tenga en el banco a algún ídolo que se muere por volver a jugar… Pero juegue quien juegue es el encuentro a ganar.
La gente dio su veredicto: “El domingo tenemos que ganar”.
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