Lamentablemente no alcanza

Lamentablemente no alcanza

 

Es cierto que River jugó un buen primer tiempo. Aceptable se podría decir. Tuvo varias a favor en los pies de Abelairas y Canales pero el buen arquero Gabbarini del equipo de Gallego, siempre respondió de buena manera. También jugaron en contra los errores groseros que tuvo el juez de línea Reta, cobrando off side tres veces de manera equivocada, lo que podría haber cambiado el encuentro. Pero por esas cosas del fútbol, la primera mitad terminó 1 a 0 a favor del ‘Rojo’ con un gol de Gandín. Por lo tanto, los de Astrada se iban en desventaja al descanso injustamente.
El esfuerzo del equipo se había notado y por eso había optimismo para revertir la situación. Pero no. Como pasa muchas veces, el equipo jugó mal, no tuvo profundidad en el segundo tiempo e Independiente lo liquidó. Los errores defensivos son constantes y la línea de volantes no gravita. Abelairas se erra un gol solo en el área chica condenándose más que nunca en la resistencia que le bridan los hinchas. No es el único culpable, pero tampoco hace demasiado para mejorar su imagen. Otra cosa que quedó clara ayer es que River no se puede dar el lujo de dejar a Gallardo sentado en el banco durante más de 50 minutos. Es dar demasiada ventaja en un plantel que carece de jerarquía. Encima los delanteros no hacen goles y la anemia ofensiva se agrava partido tras partido.
A este pobre River de hoy en día no le queda otra que sumar la mayoría de puntos posibles y pensar en armar un equipo competitivo para el próximo torneo. Porque a pesar de que a veces se exagera un poco con el tema del descenso debido a que falta mucho, tampoco es una broma…